Aquellas niñas perdidas...

Aquellas Niñas Perdidas - gatopulta.com

Una colección de las mejores pesadillas escritas por nuestros oscuros seguidores...

Las Gemelas

Eran dos lindas y tiernas gemelas, muy queridas por todos. Al cumplir los 8 años su mamá decidió mudarse de casa por motivos de negocio. Las dos gemelas estaban con mucha alegría y entusiasmo, ya que tendrían nueva vida. Así transcurrieron dos meses, un día le pidieron a la madre que vaya temprano al trabajo por unos papeles, al ver que ya había pasado tiempo la madre pensó que tal vez las niñas ya podían estar solas en la calle solas, así que decidió que fueran solas al colegio.

Tras dejarlas ir, al minuto escuchó un horrible sonido de un choque de tránsito. Fue corriendo y vio a sus hijas atropelladas con un camión encima de sus caritas. El chofer del camión asustado se escapó y debido a la conmoción por las pequeñas nadie había anotado la placa. La madre triste, llorando y gritando, las sacudía como si quisiera que despierten y le regalen una de sus sonrisas. Pasaron los años y la madre volvió a tener unas gemelas que le recordaban mucho a las anteriores y más ahora que ellas también cumplían sus 8 años.


Una tarde, las niñas jugaban en parque y se acercaron a la calle. La madre alborotada grito "Alto, cuidado aléjense de ahí", a lo cual las niñas contestaron "NO TE PREOCUPES MAMÁ, YA NOS ATROPELLARON UNA VEZ Y NO VOLVERÁ A PASAR".

Escrito por: Viankis Chambi Villanueva

Alicia en el otro mundo

Una niña llamada Alicia estaba en su cuarto sentada en su cama viendo hacia la ventana de su cuarto. De repente, sintió una voz de ultratumba que la llamaba desde su sala... Ella fue a ver, pero no encontró a nadie. Pensó que era su hermano quien la llamaba, así que fue a su cuarto, pero él estaba durmiendo, luego volvió a su cuarto y vio que la luz estaba apagada, así que la prendió. Al volver los ojos a su pieza, vio que la pared estaba cubierta de sangre y que le habían dejado un mensaje: "Ven conmigo y te llevaré al otro mundo". Al leerlo ella se fue corriendo horrorizada al cuarto de su hermano y al tratar de despertarlo se dio cuenta de que estaba muerto, tenía una expresión en su rostro de terror.

La niña corrió a la cocina a agarrar un cuchillo y un rosario mientras oraba el ángel de mi guardia, se fue al baño y trancó la puerta, pero se abría a cada rato hasta que la logró cerrar. Pero no estaba segura, en el espejo estaba escrito con sangre: "ven conmigo y te llevaré al otro mundo". Al costado del mensaje había un retrato de su hermano en el que decía "a él yo lo llevé y le encantó, ahora te toca a ti ". De repente, la puerta se abrió de un gran golpe y ella comenzó a correr, al escapar tropezó y se cayó por las escaleras haciendo que el cuchillo se hundiera profundamente en su cuello y muriera. 

Escrito por: Gabriela Salazar 

El pedido de las niñas

Eran dos niñas que no se separaban, siempre jugaban en sus mecedoras. La gente decía que eran gemelas pero no, una de ellas era adoptada.

Un día de tormenta, ellas subieron al ático de su casa y una de ellas encontró un espejo muy antiguo. Cuando la otra fue a verla apareció la muerte tras de ellas y dijo “os daré un deseo a ambas, decidan bien porque yo no romperé la promesa de venir por ustedes”.


Ambas pidieron una capa de invisibilidad. La muerte, cortando su túnica se las dio. Jugaban con la capa sin parar hasta que un día una de ellas murió. La muerte ya había cobrado una vida, pero la otra niña escapó con la túnica y desde ese día la muerte anda buscando sin parar a la niña perdida, cobrando vidas inocentes a su paso...

Escrito por: Fabiola Rodriguez Vega 

La niña y el fantasma del Ático

Una niña vivía sola en una casa vieja, ya que no tenía a nadie más con ella. Debido a eso no socializaba con nadie e intentaba no salir pues la última vez que lo hizo la golpearon por ser huérfana. Un día, ella caminó hacia el cuarto del sótano de donde venían unos ruidos extraños. Al abrir la puerta logró ver un fantasma. Se sorprendió tanto que solo corrió de allí, salió de la casa y pensó en nunca más regresar, pero en ese instante unos niños pasaron por allí y la empezaron a insultar y luego le tiraron piedras dejándola en el piso herida, llorando ella se puso a pensar que el fantasma se sentiría así, como ella se sentía. Entonces decidió regresar, se llenó de valor e ingresó al cuarto para hablar con el fantasma pero ya no estaba en ese cuarto.

Ella solo pensó en invocarlo para poder pedirle perdón y poder verlo de nuevo, esperó a que sean las 3:00 am y empezó el ritual… pero no pasó nada, ella se quedó dormida y en sueños logró verlo, ella caminó hacia él, entonces el fantasma empezó a caminar. Ella le preguntó "quién era", pero el fantasma solo caminaba hasta que se logró ver dos caminos, uno estaba completamente oscuro y se lograba ver algunas almas intentando escapar de allí, y en el otro se encontraban almas jugando con alegría. Ella se asustó pero el fantasma dijo que no tenía por qué estarlo ya que ella no iría a un camino de oscuridad sino uno de luz y felicidad por soportar tanto dolor, y le dio un abrazo y un beso en la frente dándole seguridad y haciendo que se olvidará de todo, dándole un regalo del corazón que fue un peluche.

Escrito por: Daysi AD 

¿El Homunculo?

Bueno esta es mi historia...
Era ya de noche, ya era hora de dormir...
Ese día había sido muy pesado y algo raro. Cuando cerré los ojos ya estaba a punto de entrar en profundo sueño, cuando escucho un ruido que parecía la voz de mi hermana. Me levanté de la cama y me asomé a la ventana a ver qué era eso...
Pues venia del cuarto de mi madre... Fui rápido para ver qué era, entré y mi mamá se quejaba pero estaba dormida... Le toqué el hombro y le dije si estaba bien y no me respondió... Estaba temblando...
Desesperado, la desperté a gritos. Me aleje un poco del susto porque cuando mi mamá se levantó escuché que algo cayó en el piso, era como una especie de duende...  Y mi mamá gritó, le faltaba la respiración, le pregunté qué pasó, me dijo que estaba tratando de dormir cuando algo le cayó encima y le asfixiaba, dijo que era pesado pero pequeño 
¡¿Qué creen que era eso?!

Escrito por: Fabiola Lopes Choque

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